El término brincador o brincadora se refiere a algo o alguien que tiene la capacidad de brincar, es decir, de saltar o moverse de manera ágil y enérgica.
Esta palabra puede aplicarse tanto a personas como a animales, evocando una sensación de vitalidad y alegría en sus movimientos.
En contextos más informales, también puede describir actitudes juguetonas o despreocupadas.