El cable de Litz es un tipo de conductor eléctrico que se compone de múltiples cables muy finos, cada uno esmaltado de manera individual y rodeado por una capa aislante común.
Este diseño permite reducir las pérdidas por efecto piel y mejorar la eficiencia en la transmisión de señales eléctricas, especialmente en aplicaciones de alta frecuencia.
Su estructura única lo hace ideal para diversas aplicaciones en el ámbito de la electrónica.