El término cacarizo y su variante cacariza se utilizan en México para describir algo que es cacarañado, es decir, que tiene un sonido o una forma de hablar que resulta chillona o estridente.
Esta palabra refleja una característica particular del habla en ciertas regiones, donde se asocia con un tono agudo y poco agradable.
Su uso puede variar en contextos coloquiales, pero siempre mantiene esa connotación distintiva.