Cacumen es una palabra que se utiliza de forma figurada y coloquial para referirse a la inteligencia, la capacidad mental o la agudeza de una persona.
Se emplea para describir la habilidad de alguien para pensar con claridad, ingenio y perspicacia en situaciones complejas.
También se refiere a la perspicacia de una persona, es decir, su capacidad para comprender con profundidad, agudeza y claridad las situaciones, ideas o circunstancias que enfrenta, percibiendo con rapidez y acierto los detalles y las implicaciones de cada situación.
En este contexto, "cacumen" se refiere de manera figurada y coloquial a la inteligencia, la capacidad mental o la agudeza de una persona para comprender, analizar o resolver situaciones complejas.
Se utiliza para describir la habilidad mental de alguien para pensar con claridad, ingenio y perspicacia en diferentes situaciones.
Ejemplos de uso: "Su cacumen le permitió encontrar una solución creativa al problema que enfrentábamos".
"Admiraba su cacumen para resolver acertadamente los dilemas que se presentaban en el trabajo".
En esta acepción, "cacumen" hace referencia a la capacidad de una persona para comprender con profundidad, agudeza y claridad las situaciones, ideas o circunstancias que se le presentan.
Se refiere a la habilidad de percibir con claridad los detalles y las implicaciones de una situación de manera rápida y acertada.
Ejemplos de uso: "Su cacumen político le permitió anticipar los movimientos de sus oponentes".
"La novelista demostró un gran cacumen al analizar las complejidades de la trama".
Etimología u origen de la palabra cacumen: proviene del latíncacūmen "cumbre, cima".