El término calducho tiene dos acepciones que reflejan su uso en contextos diferentes.
En primer lugar, se refiere a un caldo de poca substancia, utilizado de manera despectiva para denotar algo insípido o de escasa calidad.
En segundo lugar, en el contexto chileno, se emplea para describir un asueto o vacación corta, sugiriendo un descanso breve que puede ser apreciado por su informalidad.