Luís de Camões (1524-1580) es un destacado poeta portugués, nacido en Coimbra, aunque algunos sugieren Lisboa o Évora.
Proveniente de la familia gallega Vaz de Camoens, su juventud transcurrió en la corte, donde su amor por Natercia inspiró su lírica.
Tras conflictos en la corte y una herida en la Guerra de África, se embarcó hacia la India, enfrentando numerosas adversidades, pero logró preservar su obra maestra, Os Lusíadas.
Biografía de Camoens, Luiz Vaz De
(1524-80). Poeta portugués nacido probablemente en Coimbra (tal vez en Lisboa o Evora), descendiente por línea paterna de los Vaz de Camoens, familia gallega afincada en Portugal.
Estudió en Coimbra y dejó transcurrir su juventud en la corte, donde puso su lírica al servicio de su amor por «Natercia», a quien se pretende identificar con Catalina de Ataide. Su comedia Seleueo, que, basada en Plutarco, contenía claras alusiones a Juan de Portugal, le hizo perder el favor real y partir a la Guerra de África (1547), donde perdió el ojo derecho en una escaramuza con los moros. Regresó a Lisboa, pero fue recibido con frialdad y encarcelado (1522) por herir a un oficial de palacio durante una refriega.
Liberado al año siguiente, embarcó como soldado en la expedición de Alvares Cabral a la India. Sufrió un sinnúmero de calamidades en Macao y en Goa, y naufragó en el Golfo de Tonkín; perdió cuanto poseía, pero logró conservar el manuscrito de Os Lusíadas, escrito a lo largo de todos esos años de penuria, que habría de darle inmarcesible fama y situarle en primer lugar entre los épicos portugueses. El poema, obra maestra del renacimiento literario europeo, consta de 10 cantos, divididos en 1102 octavas reales con casi 9000 versos, y narra la expedición lusitana (de Luso, hijo de Baco, mítico fundador de Portugal) a la India.
Comienza describiendo las deliberaciones de los dioses olímpicos sobre la conveniencia de ayudar u oponerse a los navegantes, narra después los tropiezos de Vasco de Gama en Mozambique y Mombasa, su feliz llegada a Melinde protegido por Venus, quien le salvará también de las furias del océano, desencadenado contra él por Baco, y la arribada final a la India; las tretas del Zamorín para perder a los portugueses y la fidelidad del converso Monzaide. Logran finalmente escapar los portugueses y en el viaje de regreso son acogidos por Venus y sus ninfas en prodigiosa isla. Quizá sean sus episodios más bellos el de Inés de Castro y la aparición de Adamastor, personificación del Cabo de las Tormentas. La obra acaso adolezca de la excesiva preocupación de su autor por seguir a Homero y Virgilio, pero es un bellísimo canto al tesón del hombre y a la humanidad, aparte de contener intercalada una lírica descripción de los principales episodios de la historia portuguesa; verdadera epopeya de navegantes más que de conquistadores, hizo famoso a su autor apenas publicada (1572), a pesar de lo cual, y de la pensión concedida por el rey don Sebastián, Camoens moriría en la mayor miseria.
Su producción comprende también otras dos comedias, Los anfitriones y La amada de Filodemo, numerosas Rimas —entre las que destacan 356 sonetos, 20 de ellos escritos en castellano— y varios poemas largos escritos a la manera italiana.