El término campillo se refiere a un campo pequeño, que puede ser un terreno de cultivo o un espacio natural reducido.
Este concepto evoca la idea de un lugar más íntimo y manejable en comparación con extensiones más grandes de tierra.
En diversas culturas, los campillos han sido utilizados para la agricultura, el pastoreo o simplemente como espacios de recreo, destacando su importancia en la relación del ser humano con la naturaleza.