Hugo Capeto (939?-996?) fue un importante rey de Francia que marcó el inicio de la dinastía capetiana.
Hijo de Hugo el Grande, se convirtió en rey tras la muerte del último carolingio en 987.
Su ascenso al trono fue crucial para la consolidación del poder en un momento de inestabilidad, ya que tuvo que enfrentar desafíos del Sacro Romano Imperio y de los pretendientes carolingios.
Su legado sentó las bases para futuras dinastías que reinarían en Francia.
Biografía de Capeto, Hugo
(939?-996?). Rey de Francia, hijo de Hugo el Grande, duque de Francia y conde de París. Aunque el origen de la familia sea oscuro, los Capetos se habían venido identificando con la porción occidental o francesa del Imperio Carolingio y con París y la Ile de France en particular. La defensa de París contra los normandos en 885 fue organizada por Eudes (Odón), rey de Francia (888-98), bisabuelo de Hugo. Al disolverse el Imperio Carolingio, los francos occidentales consideraron a los Capetos sus caudillos naturales. En 987, a la muerte del último carolingio, Luis V, Hugo Capeto fue elegido rey. Hubo de defender su trono contra las pretensiones del Sacro Romano Imperio y los pretendientes carolingios al trono, para lo cual compró el apoyo de sus vecinos feudales con la concesión de grandes tierras y feudos. Logró establecer a su hijo en el trono, con lo que echó los cimientos de las dinastías de los Capetos, Valois y Borbones, que, sucesivamente, habían de reinar en Francia durante más de 800 años. Véase Borbón, Familia; Valois, Casa de.