La palabra captividad se refiere a un estado de cautiverio o cautividad, donde un individuo o grupo se encuentra privado de su libertad.
Aunque esta acepción es considerada antigua y actualmente está en desuso, evoca la idea de estar sometido a una fuerza que restringe el movimiento y la autonomía.
En su esencia, la captividad implica una situación de vulnerabilidad y dependencia, reflejando la lucha por la libertad.