Los carmentales son festividades de origen romano que se celebraban en honor a la ninfa Carmenta.
Estas fiestas, que se utilizan en plural, eran momentos de celebración y rituales dedicados a esta deidad, asociada con la maternidad y la profecía.
En la antigüedad, los carmentales representaban una conexión entre lo divino y lo humano, resaltando la importancia de la figura femenina en la cultura romana.