El término castellán se refiere principalmente a un alcaide o gobernador de un castillo, aunque su uso es específico en ciertos contextos, como en la orden de San Juan y en la región de Aragón.
En este sentido, el castellán de Amposta es un ejemplo de esta función, que implica la responsabilidad de la defensa y administración de un territorio.
Así, el término evoca tanto una figura histórica como un papel de liderazgo en la gestión de fortificaciones.