El término catecumenado se refiere al periodo de preparación que un catecúmeno debe atravesar antes de recibir el bautismo.
En los inicios de la Iglesia, solo se admitía el bautismo a quienes demostraban estar listos, lo que requería una instrucción breve.
Con el tiempo, este proceso se volvió más riguroso y extenso, abarcando varios años.
El catecumenado es esencial, ya que implica un conocimiento profundo de la doctrina y la ley divina, preparando al individuo tanto intelectual como moralmente.
m. Relig. Tiempo durante el cual se preparaba el catecúmeno para recibir el bautismo.
Al principio de la Iglesia sólo se bautizaba a aquellos considerados aptos. Esta aptitud se probaba en un curso corto y de carácter simple. Pero a medida que las iglesias se organizaban, tanto la instrucción como la probidad comenzaron a ser más elaboradas y largas, durando algunos años.
El catecumenado se fundamenta en que la aceptación de ser cristiano implica conocer y creer la doctrina y la ley divina, preparando al individuo de forma intelectual y moral para esto.
Tras finalizar esta etapa de preparación y prueba, sus nombres se inscribían entre los competentes para recibir el bautismo y cumplían ciertos rituales.
El tiempo de catecumenado fue acortándose a medida que crecía el número de conversos. Después de la caída del imperio de Occidente, el catecumenado era solamente la preparación previa al bautismo. De hecho la mayoría de los bautizados ya eran bebés porque nacían directamente en familias cristianas.
En la actualidad, por lo general, se llama catecúmeno a aquel adulto que no ha recibido los sacramentos de niños y debe prepararse para ello.
Origen etimológico de catecumenado: proviene de catecúmeno y con el sufijo -ado.