El celostato es un instrumento esencial en la astronomía, diseñado para reflejar la luz hacia un telescopio de posición fija.
Su funcionamiento se basa en un espejo plano que gira a la velocidad adecuada para compensar el movimiento de rotación de la Tierra, permitiendo que la parte del firmamento observada parezca estática.
Este dispositivo es fundamental en telescopios de torre, utilizados para realizar observaciones solares en importantes observatorios alrededor del mundo.
Instrumento que sirve para reflejar la luz hacia un telescopio de posición fija. Consiste principalmente en un espejo plano que gira mediante un mecanismo de relojería a la velocidad de una rotación en 48 horas y está montado de tal manera que su plano y el eje de rotación son paralelos al eje de la Tierra (v. Ecuatorial). Como la velocidad de rotación del rayo reflejado es doble que la del espejo, la parte del firmamento observada parece que permanece quieta a pesar del movimiento rotatorio de la Tierra (v. Astronomía; Esfera celeste). Aunque la dirección del rayo reflejado no cambia, se necesita un segundo espejo para enviar la luz a lo largo del eje óptico de un telescopio horizontal o vertical. Los celostatos se emplean en telescopios de torre, construidos para observaciones solares, como los del Observatorio de Monte Wilson, el Observatorio McMath-Hulbert de la Universidad de Michigan y los observatorios de Arceti (Florencia, Italia), y de Torre Einstein (Potsdam, Alemania), y para instrumentos horizontales como algunos espectroheliógrafos.