El término cemento armado se refiere al uso de hormigón armado, que es una mezcla de cemento, agua, arena y grava, reforzada con varillas de acero.
Este material combina la resistencia del hormigón a la compresión con la flexibilidad del acero, lo que lo hace ideal para estructuras que requieren durabilidad y soporte.
Su aplicación es fundamental en la construcción moderna, proporcionando seguridad y estabilidad a edificaciones.