Paul Cézanne (1839-1906) fue un destacado pintor francés, considerado una de las figuras más influyentes del arte abstracto en los siglos xix y xx.
Nacido en Aix-en-Provence, su vida estuvo íntimamente ligada a su carrera artística.
Tras abandonar la banca, se trasladó a París, donde se unió a los impresionistas y participó en debates sobre el nuevo movimiento.
Su obra refleja una búsqueda constante de innovación y expresión, marcando un hito en la historia del arte.
Biografía de Cézanne, Paul
(1839-1906). Pintor francés, una de las figuras más importantes e influyentes del arte abstracto en los siglos xix-xx. Nació en Aix-en-Provence, hijo de un banquero. Su biografía aparece tan estrechamente vinculada a los momentos culminantes de su carrera artística que casi puede decirse literalmente que su vida fue su obra.
Iniciado en la carrera bancaria, pronto abandonó los negocios y emprendió el estudio del arte en París, donde se adhirió a los artistas agrupados en torno al pintor revolucionario Édouard Manet, que más tarde recibirían el nombre de impresionistas (v. Impresionismo). Entró de lleno en la barahúnda de discusiones y polémicas suscitadas al nacer este movimiento y, en unión de su viejo amigo Emile Zola, participó en la controversia periodística con el Salón oficial, en el que, tras exponer en el Salón des Refusés (Salón de los Rechazados) en 1863, nunca fue admitido en un total de quizá 13 tentativas. En 1867 un cuadro suyo expuesto en Marsella hubo de ser retirado para evitar su destrucción por la multitud (v. Manet, Édouard; Zola, Émile). Las naturalezas muertas de Cézanne obtuvieron grandes elogios de Manet, jefe de los impresionistas. Pintó con la paleta propugnada por esta escuela (con la adición del ocre) y exhibió sus obras en la Primera Exposición de Impresionistas (1874). Sin embargo, se preocupó principalmente de los problemas planteados por su propia originalidad. Los historiadores de arte no le identifican hoy con el impresionismo, aunque contribuyera a su difusión.
En 1870 comenzó a vivir con Hortense Fiquet, joven modelo, con la que tuvo un hijo, bautizado con su nombre. Cézanne y Hortense se casaron en 1886. Este mismo año murió su padre y le dejó una fortuna. Durante largas temporadas, cada vez más prolongadas después de la muerte de su padre, vivió retirado en una finca que poseía la familia en Aix, donde trabajó sin cesar. Sus experiencias en tomo al paisaje y sus estudios de figuras le llevaron a una preocupación por «el cubo, el cilindro y el cono», que más tarde, en otras manos, desembocó en el cubismo y en la mayor parte de los estilos modernos. Véase Abstracto, Arte; Cubismo.
Aunque en 1895 el marchante M. Vollard preparó la primera gran exposición de sus obras, éstas no fueron presentadas al público adecuadamente hasta la Exposición Universal de 1900, seis años antes de su muerte. Entre sus obras maestras figuran Los Hermanos, en que trabajó siete años, Paisaje con viaducto, El Puente de Creteil y Jugadores de Cartas.
Aun cuando su propósito definido no fue otro que el de asentar la pintura de su época sobre los sólidos cimientos del arte clásico, su mente original y su perspicacia abrieron horizontes de cuya importancia no se percató plenamente. Otros muchos artistas habían de explotar esos horizontes en las décadas siguientes. Zola resumió el sentido radical de la obra de Cézanne y de la suya propia como sigue: «Revolvimos una masa de ideas contradictorias, examinamos y rechazamos todos los sistemas y después de tan ardua labor nos dijimos que fuera de la vida vigorosa e individual no había más que engaño y estupidez». Véase Francia, Arte, Comienzos del cubismo.