La palabra chalona se refiere a un tipo de carne que ha sido sometida a un proceso de salado y seco al sol.
En Bolivia, este término describe específicamente la carne de oveja, mientras que en Perú, se utiliza para referirse a la carne de carnero que ha sido acecinada.
Ambas acepciones destacan la importancia de este alimento en la gastronomía local, reflejando tradiciones culinarias que valoran la conservación de la carne.