El término cidral se refiere a un lugar donde crecen los cidros, árboles frutales que producen una fruta similar al limón, conocida por su aroma y sabor característicos.
Este sitio no solo destaca por su vegetación, sino que también puede ser un espacio de cultivo y producción.
La presencia de cidros en un cidral sugiere un entorno natural que favorece el crecimiento de estas plantas, contribuyendo a la biodiversidad local.