El término cipolino se refiere a un tipo de mármol que se caracteriza por su composición micácea, lo que le otorga un aspecto distintivo y atractivo.
Este material es apreciado en la arquitectura y el arte por su belleza y durabilidad.
La variante femenina, cipolina, se utiliza en contextos similares, destacando la versatilidad de este recurso natural en diversas aplicaciones estéticas y funcionales.