La circulación planetaria de vientos se refiere a los grandes sistemas de vientos que predominan en la atmósfera, los cuales juegan un papel crucial en el transporte de calor, vapor acuoso y energía desde las zonas ecuatoriales hacia las regiones polares.
Estos vientos se dividen en categorías según su altitud, con vientos de bajo nivel en las capas más cercanas a la superficie y vientos de alto nivel que predominan en las alturas superiores, influyendo en el clima global.
circulación planetaria de vientos
La circulación planetaria puede considerarse formada por los sistemas de los grandes vientos predominantes. Tales movimientos de aire transportan calor, vapor acuoso y «momento» desde las latitudes ecuatoriales a las polares.
Vientos de bajo y alto nivel. Los primeros se producen en las capas más bajas de la atmósfera, es decir, las comprendidas entre, la superficie de la tierra y la altura aproximada de 1,5 km. En las latitudes templadas entre los 30 y 60° N predominan los vientos del O, mientras que al N de los 60° N, así como en las latitudes subtropicales, al S de los 30° N, prevalecen los del E. Estas formas de vientos se conocen desde hace muchos años con los nombres de «oeste dominante», «este polar» y «alisios del nordeste».
En las regiones atmosféricas superiores, desde alturas de 3 hasta quizá 16 km, la dirección predominante es de O a E en la mayoría de las latitudes, salvo en . las cercanías del ecuador, donde se producen frecuentemente vientos del E. Esta capa profunda de vientos forma un gran remolino alrededor del polo, cuya fuerza aumenta a medida que se acerca a la base de la estratosfera (v. Atmósfera). Se ha descubierto últimamente que la fuerza máxima de los vientos del O superiores reside en una zona bastante estrecha comprendida aproximadamente entre los 30 y 35° N a una altura de 9000 a 15000 m, es decir, en la misma base de la estratosfera. Esta corriente de aire adquiere en ocasiones velocidades hasta de 500 km/h. A niveles superiores a 16 km, poco se sabe, relativamente, acerca de la circulación media del aire, salvo que predominan el viento del O en invierno y del E en verano.