El término cisalpino se refiere a las regiones que se encuentran entre los Alpes y Roma.
Este adjetivo, que proviene del latín, evoca una ubicación geográfica específica en la antigua Italia.
Las tierras cisalpinas eran conocidas por su diversidad cultural y su importancia histórica, ya que formaban parte de la interacción entre diferentes civilizaciones y tradiciones en la península itálica.