Las clases de cosméticos se pueden dividir en cinco grupos generales: tratamiento, cabello, maquillaje, perfumería y varios.
Los cosméticos de tratamiento, como cremas y lociones, se utilizan para mejorar la salud y apariencia de la piel.
Estos productos pueden incluir limpiadores, cremas lubricantes y astringentes, cada uno con propiedades específicas para abordar diferentes necesidades cutáneas, desde la limpieza hasta la hidratación.
clases de cosméticos
Pueden dividirse en cinco grupos generales: tratamiento, cabello, maquillaje, perfumería y varios.
Los tratamientos de la piel se hacen generalmente a base de cremas y lociones. Las cremas limpiadoras suelen contener disolventes de la suciedad, de la grasa y del color. Las cremas lubricantes y alimenticias están sobreengrasadas con objeto de ablandar y alisar la piel y pueden contener sustancias naturales tales como los estrógenos, que existen en los cutis jóvenes pero que son escasos en la piel de las personas mayores. Las lociones de carácter astringente consiguen dar un aspecto más lozano; las de limpieza de poros eliminan sus impurezas; agentes emolientes, en forma de cremas, para cara y manos se emplean muy frecuentemente. Véase Piel.
Para maquillaje se ofrecen docenas de preparados en todos los matices y en cada tipo (v. Maquillaje). El lápiz labial es seguramente el más empleado en este grupo. Los polvos para la cara se presentan en forma compacta o bien sueltos, con formulaciones diferentes según el tipo de tez. Otras presentaciones son las cremas-base y los coloretes en forma de crema, en líquido o en pastillas. El arreglo de los ojos comprende los productos para el sombreado, los lápices para las cejas, los de pestañas, etc. Los barnices para uñas se emplean cada vez más profusamente y se consiguen ahora en colores más variados, de secado más rápido y más duraderos.
El cabello requiere diversos tipos de cosméticos, ya sea para su tratamiento o para su coloración. Las permanentes de aplicación casera han alcanzado gran popularidad con la invención de la permanente en frío y sin aparatos. Antes, esta operación sólo podía llevarse a cabo por personal entrenado, conocedor de los tiempos requeridos y del hábil manejo de máquinas complicadas. Los envases para la permanente en casa dan instrucciones para su aplicación a los distintos tipos de pelo y para conseguir los efectos deseados. También se ha popularizado el teñido del cabello en el hogar; los tonos y reflejos conseguidos pueden ser temporales, como son los de las lociones tras el champú, los fijadores y los lápices para el pelo. Los cambios de color más duraderos se consiguen mediante decoloración o bien por teñido. Los champús para la limpieza contienen jabones o alguno de los modernos detergentes químicos. Otros productos auxiliares suprimen el exceso de grasa o bien la sequedad y la fragilidad. Los fijadores por pulverización son de una ayuda valiosa en el peinado. Véase Peinado.
En perfumería encontramos hoy productos más duraderos, más sutiles y brillantes gracias a la investigación científica. El perfume por antonomasia es la forma más concentrada de una fragancia, pero sólo una de sus múltiples formas; variantes más diluidas de un perfume son los aceites para baño, los talcos, las colonias sólidas o líquidas y aguas de tocador. Véase Perfume.
Entre los varios incluiremos los depilatorios, los desodorantes y los productos antisolares. Los depilatorios destruyen el pelo o vello por vía química, o bien, como las ceras, lo maceran para facilitar su eliminación mecánica; los abrasivos lo suprimen por frotamiento. Los desodorantes encubren el olor de la transpiráción y los astringentes detienen temporalmente su flujo. Las preparaciones antisolares a base de cremas, aceites, líquidos o pulverizaciones pretenden filtrar los rayos ultravioleta del sol y con ellas pueden conseguirse distintos matices morenos según el tipo de preparación usado.
Ciertos procedimientos mecánicos, incluida la cirugía plástica, pueden considerarse como cosmética, aunque sus beneficios sean más bien de orden médico. El ejercicio es un buen auxiliar y puede ser general o específico. El masaje, facial o general, mejora el tono muscular. El cuidado de los dientes, incluido el cepillado, la ortodoncia y prótesis diversas mejoran la apariencia al mismo tiempo que contribuyen a la buena salud. La cirugía plástica aparte de realzar la belleza y corregir las deformidades físicas contribuyen al bienestar psíquico (v. Cirugía plástica). Los dermatólogos continúan trabajando en el campo de la cosmética, para el tratamiento de los casos de acné rebelde, barrillos y escaras mediante nuevos procedimientos.
