El clavicémbalo es un instrumento musical de cuerdas que se popularizó en el siglo XVIII.
Su diseño es similar al del piano, pero su mecanismo de producción de sonido es diferente, ya que las cuerdas son pulsadas por pletinas en lugar de ser golpeadas por martillos.
Este instrumento es conocido por su timbre brillante y su papel fundamental en la música barroca, siendo un elemento clave en la interpretación de obras de esa época.