El término clavo de pie se refiere a un tipo de clavo que no excede los 20 cm de largo.
Este elemento es utilizado en diversas aplicaciones, como la construcción y la carpintería, donde su tamaño compacto lo hace ideal para trabajos específicos.
Su diseño permite una fácil manipulación y fijación, siendo una herramienta esencial en el ámbito del bricolaje y la fabricación.
Para una comprensión más amplia, se recomienda consultar la definición de clavo.