La palabra cobrable se refiere a algo que puede ser cobrado o que está destinado a ser cobrado.
Este término se utiliza comúnmente en contextos financieros y comerciales, donde se hace referencia a deudas, facturas o cualquier tipo de obligación económica que se espera recibir.
En esencia, lo cobrable implica la posibilidad de obtener un pago por un servicio o producto proporcionado.