El Colima, conocido también como el Volcán del Fuego, es un impresionante volcán mexicano que se ubica en el este del estado de Jalisco, cerca de Ciudad Guzmán.
Con una altura de 3960 metros, su cono volcánico es considerado uno de los más bellos del mundo, destacándose por su forma casi perfecta.
Su cráter, de aproximadamente 500 metros de diámetro, emite frecuentemente humo y vapor, mientras que su entorno alberga formaciones volcánicas únicas, reflejando su antigua actividad.
Volcán mexicano, también llamado Volcán del Fuego, que forma parte del grupo eruptivo de este mismo nombre, en el E del estado de Jalisco y al SO de Ciudad Guzmán y de la margen meridional del lago Chapala. Su cono volcánico, que por la pureza de su forma es uno de los más bellos y característicos del mundo, se alza aislado hasta 3960 m sobre un crestón andesítico derivado del mismo Nevado de Colima. Es considerado como un tipo casi perfecto: un gran cono cuya cumbre está oscurecida frecuentemente por las densas masas de humo y vapor desprendidas de su cráter. Éste tiene forma casi circular cuyo diámetro mayor tiene unos 500 m y el menor 450. Esta simplicidad de líneas fue alterada en 1869, en que surgió un cono lateral. que no funciona siempre al unísono del cráter principal. A su alrededor se encuentra un abrupto paisaje con curiosos aparatos volcánicos como los cinco cráteres del Apastepetl y los «Hijos del Volcán» existentes en su flanco meridional. Su actividad es muy antigua; se conocen documentalmente las erupciones de 1575, 1611, 1806, 1808 y 1818; con la violentísima de 1869 se inició un periodo de casi continua actividad: 1872, 1873, 1885, 1887, 1903, 1909 y 1913. Tales erupciones son muy variables, van acompañadas frecuentemente de terremotos, como el que destruyó Zapotlán en 1808 y coinciden con las de los volcanes de las Pequeñas Antillas.
