El término cominillo tiene varias acepciones que reflejan matices de inquietud y desconfianza.
En su uso más literal, se refiere a la joya o cizaña, pero en un contexto más figurado, especialmente en Chile, denota un sentimiento de escozor, recelo o reconcomio.
Además, en Argentina y Chile, se asocia con la vacilación o inquietud, lo que resalta su carga emocional en el lenguaje coloquial.