En el ámbito lingüístico, el término concesivo hace referencia a una estructura gramatical que introduce una idea que contrasta con la principal.
Esta estructura se utiliza para expresar una concesión, es decir, para admitir un hecho contrario a lo esperado o lógico en relación con la idea principal.
En español, los conectores "aunque", "a pesar de que", "si bien" y "por más que" son ejemplos de elementos concesivos que introducen esta estructura en una oración.
En el ámbito lingüístico, el término concesivo se refiere a una estructura gramatical que introduce una idea que contrasta con la principal. Esta estructura se utiliza para expresar una concesión, es decir, para admitir un hecho contrario a lo esperado o lógico en relación con la idea principal.
En español, los conectores "aunque", "a pesar de que", "si bien" y "por más que" son ejemplos de elementos concesivos que introducen esta estructura en una oración.
En el contexto del discurso, el uso de una construcción concesiva permite matizar la relación entre dos ideas, mostrando una oposición entre ellas. Esto enriquece la expresión del pensamiento al reconocer la existencia de un hecho contrario a lo esperado, sin invalidar la idea principal.