El término conde de Barcelona se refiere a un título nobiliario que ostentaba el rey de España, evocando la historia de los antiguos soberanos de Cataluña.
Este título simboliza la conexión con un pasado feudal y la herencia cultural de la región.
A través de esta denominación, se reconoce la importancia histórica y política de los condes en la formación de la identidad catalana y su influencia en la monarquía española.