La confesión general es un acto en el que una persona reconoce y expresa sus pecados acumulados a lo largo de su vida o de una parte significativa de ella.
Este tipo de confesión busca una profunda reconciliación espiritual, permitiendo al individuo reflexionar sobre sus acciones pasadas y recibir el perdón.
Es un momento de introspección y renovación que puede ser fundamental en el camino hacia la sanación personal.