El término confitero se refiere a la persona que se dedica a la elaboración o venta de dulces y confituras, ofreciendo una variedad de delicias que endulzan la vida.
Por otro lado, la confitera es el establecimiento donde se producen y venden estos productos, un lugar que invita a disfrutar de sabores y texturas únicas.
Ambos conceptos están íntimamente relacionados con el arte de la pastelería y la gastronomía dulce.