La conjugación en biología es un tipo de reproducción que implica la unión temporal de dos individuos de la misma especie para intercambiar parte de su materia nuclear.
Este proceso se observa en ciertas algas verdes, como las del género Spirogyra, donde las células se conectan mediante tubos formados por la disolución de sus paredes terminales.
Esta interacción puede dar lugar a diferentes configuraciones, como la conjugación escaleriforme o la conjugación lateral.
Biografía de conjugación (biología)
En Biología forma de reproducción consistente en la unión temporal simple de dos individuos de la misma especie para intercambiar parte de su materia nuclear. En. las plantas se verifica, por ejemplo, entre el grupo de algas verdes conocidas por Cignematales, especialmente las del género Spirogyra. Al unirse dos hileras de células de estas plantas filamentosas, se produce una protuberancia en cada una de las células como si fuera a formarse una rama.
Cuando se encuentran los extremos de estas proyecciones, se disuelven las paredes terminales para formar un tubo que une las dos células proyectadas. A veces se forman muchos de estos tubos al mismo tiempo entre dos hileras cercanas para formar una especie de escalera (conjunción escaleriforme). Los tubos pueden formarse entre células adyacentes de la misma hilera, con lo que resulta la llamada conjugación lateral. Una vez formados los tubos, el protoplasma de las células masculinas se contrae y mueve a través del tubo de unión hasta juntarse con el protoplasma de las células femeninas (v. Plantas, Tejidos y órganos de las. Tejidos, Tejidos embrionarios o Meristemáticos). La unión de estas células da lugar a una cigospora. En algunas plantas relacionadas con la Spirogyra, las células se encuentran dentro del tubo para formar la cigospora. Existen muchas variantes de conjugación en las familias de plantas simples. Véase Reproducción vegetal.
La conjugación se produce también entre los animales. En el Paramecium caudatum, dos individuos se juntan por sus bocas y se mantienen en tal posición hasta que entre ellos se forma un puente de protoplasma (v. Protoplasma). En cada individuo se producen entonces una serie de cambios nucleares. El macronúcleo se rompe y desaparece, mientras el micro-núcleo de cada individuo se descompone para formar cuatro micronúcleos. Tres de cada serie de cuatro de estos cuerpos degeneran sin tomar parte activa en los cambios posteriores. El micronúcleo restante de cada individuo se divide de nuevo para producir un micro-núcleo errante y otro estacionario. Cada uno de los micronúcleos errantes cruzan entonces el puente protoplásmico y se funde con el micronúcleo estacionario del otro individuo, con el que forma un sincarion. Se separan entonces los individuos y el sincarion acabado de formar en cada uno se divide hasta tres veces para formar ocho núcleos: cuatro micronúcleos y cuatro macro-núcleos. Cada uno de los animales separados se divide por bipartición para formar dos individuos con cuatro núcleos, que, a su vez, se dividen para dar origen a cuatro nuevos individuos, con un micronúcleo y un macronúcleo cada uno. Véase Paramecio; Reproducción animal.