El término conjurador se refiere a una persona que conjura, es decir, que participa en una conspiración contra una autoridad, como el Estado o un príncipe.
Esta acción implica un plan secreto y deliberado para derrocar o desafiar el poder establecido.
La figura del conjurador evoca tanto la astucia como el riesgo de actuar en contra de las normas y leyes, buscando un cambio a través de la conjuración.