El término correlimos se refiere a un grupo de pájaros que pertenecen a la familia escolopácidos.
Estos aves, emparentados con la chocha perdiz y la agachadiza, son de pequeña talla y se caracterizan por su pico largo y estrecho, así como por sus migraciones notables.
Entre las especies más destacadas se encuentran el correlimos menor, el correlimos purpúreo y el correlimos solitario, cada uno con su propio rango de distribución en América del Norte.
Nombre general aplicado a varios pájaros pertenecientes a la familia escolopácidos. Muy emparentados con la chocha perdiz y la agachadiza, los correlimos son zancudas de pequeña talla con el pico tan largo como la cabeza, estrecho, ligeramente comprimido y rugoso hacia la punta. Tienen cuatro dedos; el primero es pequeño y está dirigido hacia atrás. En un grupo el pico es más largo que la cabeza, recto o ligeramente curvado y terminado en una punta dura y aguda. Las alas son moderadamente largas y puntiagudas, la cola más bien corta y generalmente listada. Estos pájaros son notables por sus migraciones.
Especies importantes son el correlimos menor (Pisobia minutilla), emigrante invernal a través del S del Canadá y de los Estados Unidos; el correlimos purpúreo (Arquatella marítima) del NE de Norteamérica; el correlimos solitario (Tringa solitaria), extendido por el S del Canadá y también por el N de los Estados Unidos; el correlimos semipalmeado (Ereunetes pusillus) del E de Norteamérica. El correlimos común o moteado (Actitis macularia), llamado frecuentemente «fisgón» y «cola de columpio» es un visitante regular de los Estados Unidos. Mide de 18 a 20 cm de longitud y tiene color pardo oliváceo oscuro por el dorso y blanco con manchas negras por el vientre. Se reproduce en los Estados Unidos y construye generalmente su nido con hierbas, cortezas y hojas, dispuestas entre piedras. Pone cuatro huevos. Frecuenta especialmente las orillas de los lagos y los lechos de guijarros de las aguas corrientes.