El término cortalápices se refiere a un instrumento diseñado específicamente para aguzar lápices, permitiendo que la punta sea más fina y precisa para escribir o dibujar.
Este útil objeto es común en escuelas y oficinas, facilitando el mantenimiento de los lápices en condiciones óptimas.
Su diseño puede variar, pero su función principal siempre es la misma: asegurar que los lápices estén listos para su uso.