La costra láctea es una afección común en los bebés, caracterizada por una erupción pustulosa que se presenta en el cuero cabelludo y otras áreas del cuerpo.
Esta condición se manifiesta como una serie de costras amarillentas y grasosas, que pueden causar picazón, aunque generalmente no son dolorosas.
Aunque suele desaparecer por sí sola, es importante cuidar la piel del bebé para evitar irritaciones.