La palabra covacha tiene dos significados principales.
En su primera acepción, se refiere a una cueva, un espacio natural subterráneo que puede servir de refugio o hábitat para diversos seres vivos.
En un sentido más coloquial, se utiliza para describir un zaquizamí, que es un lugar desordenado o un espacio pequeño y poco cuidado, a menudo lleno de objetos en desuso.
Ambos usos reflejan la idea de un espacio cerrado y, en ocasiones, olvidado.