El término crepitar se refiere a un sonido característico que se asemeja a los chasquidos producidos por la leña al arder.
Este fenómeno ocurre cuando el calor provoca la expansión y ruptura de las pequeñas burbujas de aire atrapadas en la madera, generando un ruido distintivo.
Así, el verbo encapsula la esencia de un momento íntimo y cálido, evocando la atmósfera de una fogata o una chimenea encendida.