La cría de pavos ha ganado relevancia en los últimos años, convirtiéndose en una industria especializada.
Esta actividad enfrenta desafíos similares a la cría de pollos, como parásitos y enfermedades, lo que dificulta su manejo en granjas pequeñas.
Entre las variedades más valoradas se encuentra el Bronze, conocido por su peso y características musculares.
Además, se han realizado esfuerzos para desarrollar pavos de tamaño más pequeño, logrando avances significativos en este ámbito.
cría de pavos
Ha aumentado en importancia durante los últimos años hasta convertirse en una industria sumamente especializada. Como quiera que los pavos están sujetos a los mismos parásitos y enfermedades que los pollos, no es práctico criar una manada en una granja pequeña. El Bronze es el pavo más apreciado, pero está adquiriendo mucha importancia la variedad llamada de pecho ancho. El Bronze pesa de 11 a 16 kg y la hembra de 7 a 13 kg. Los Bronze de pecho ancho son aproximadamente del mismo tamaño, pero con mayor peso en los músculos pectorales y menor en el esqueleto. También se ha intentado obtener un pavo de tamaño pequeño o familiar y, aunque todavía no se ha llegado al fin deseado, se han conseguido bastantes progresos.
El empollado en las secciones de cría de pavos se lleva a cabo en incubadoras. Los pavipollos se crían sobre alambre para protegerlos de los parásitos y, cuando se les pasa al suelo, han de cambiarse de sitio cada dos días con objeto de disminuir la posibilidad de que sean afectados por los parásitos que propagan la infección protozoaria cabeza negra. La cría de pavos en escala comercial presenta mayores dificultades que la de pollos y la cría de unos cuantos entre el averío no es recomendable. Por tanto, toda persona interesada en ello debe estudiar cuidadosamente los problemas que supone.