El término crucifijo se refiere a una efigie que representa a Jesucristo en la cruz, simbolizando su sacrificio y redención para la humanidad.
Este objeto es de gran importancia en la religión cristiana, ya que evoca la pasión y muerte de Cristo, siendo un elemento central en la devoción y la liturgia.
Además, el crucifijo se utiliza como un signo de fe y protección para muchos creyentes.
Etimología u origen de la palabra crucifijo: (latín crucifixus, crucificado.)
2º artículo
Imagen de Cristo crucificado, símbolo universal de fe y devoción. Mientras que en la Iglesia Católica la imagen se sujeta a la cruz, en la Ortodoxa el Cristo suele aparecer pintado. El Redentor, que al principio se presentó vivo, vestido y coronado, aparece casi siempre, a partir del siglo xii, muerto y cubierto sólo con un paño ceñido a la cintura. Muchos grandes artistas dedicaron su genio a la talla de crucifijos. Véase Cruz; Crucifixión.
Origen etimológico de crucifijo: proviene de la palabra latina crucifixus (que significa "crucificado"), participio de crucifigere, a su vez de crux, "cruz" y figere, "fijar"
