El término culcusido se refiere a una forma coloquial de describir a alguien que ha sido corcusido, es decir, que ha sufrido un daño o una herida, ya sea física o emocional.
Esta palabra proviene del participio pasado de corcusir, un verbo que implica un estado de deterioro o afectación.
En el lenguaje familiar, se utiliza para expresar una condición de vulnerabilidad o debilidad en una persona.