Los culdeos fueron seguidores de un movimiento monástico que surgió en Irlanda durante el siglo VIII.
Originalmente, su nombre, derivado de "caldees", significa compañeros o vasallos de Dios.
En un contexto de decadencia espiritual, los culdeos se presentaron como reformadores, comenzando como ermitaños y formando comunidades con abades propios.
Aunque su influencia se extendió a Escocia, nunca lograron el reconocimiento formal como orden religiosa.
Seguidores de un movimiento monástico aparecido en Irlanda en el siglo viii. En su forma original significó la palabra (caldees) compañeros o vasallos de Dios. En Irlanda, que había sido un gran centro de actividad misionera en los siglos vi y vii, sobrevino un ulterior periodo de decadencia espiritual, en que los cuídeos se presentaron como reformadores. Empezando como ermitaños, agrupáronse poco a poco en comunidades, cada una con su propio abad, aunque nunca lograron el reconocimiento de orden religiosa bajo regla o jefatura reconocidas. El movimiento se extendió a Escocia, donde adquirió más fuerza que en Irlanda. Hubo un establecimiento culdeo en York (Inglaterra) y otro, por lo menos, en Gales. En el siglo xii adoptaron la regla canónica y perdieron la mayor parte de sus rasgos característicos. Véase Monacato.