El término cuscurro se refiere a un trozo de pan que ha perdido su frescura y se ha vuelto duro.
Este tipo de pan, a menudo desechado, puede ser utilizado en diversas preparaciones culinarias, como sopas o guisos, donde su textura se suaviza al absorber líquidos.
Así, el cuscurro no solo representa un alimento en desuso, sino también una oportunidad para aprovechar los recursos y evitar el desperdicio.