El término damnado o damnada se refiere a una persona que ha sido condenada, especialmente en un contexto antiguo o literario.
Esta palabra, aunque hoy en día se considera una acepción anticuada, evoca la idea de alguien que ha sido sentenciado a un castigo severo, ya sea en un sentido moral o espiritual.
Su uso ha disminuido, pero aún puede encontrarse en textos clásicos o en discusiones sobre la condenación en un sentido más amplio.