Dar garantía implica comprometerse a garantizar, avaluar o certificar la veracidad, calidad o cumplimiento de algo.
Al dar garantía, se asume la responsabilidad de respaldar una obligación o compromiso, asegurando que se cumplirá lo prometido.
Es importante evaluar cuidadosamente antes de dar garantía, ya que implica riesgos y compromisos que pueden tener consecuencias negativas si no se cumplen.
Es recomendable ser cauteloso al dar garantía por terceros, ya que se puede incurrir en situaciones complicadas o peligrosas si no se conoce completamente la situación.