La palabra dardada se refiere a un golpe que se daba con un dardo, un objeto afilado que se lanza con precisión.
Esta acepción es considerada anticuada y actualmente se encuentra en desuso, lo que la convierte en un término poco común en el lenguaje cotidiano.
A pesar de su rareza, su significado evoca una imagen de acción y precisión, características propias de los dardos en el contexto de juegos o competencias.