La palabra dedada se refiere a una porción que se toma con el dedo, como en el caso de una dedada de miel, que implica una pequeña cantidad.
Además, en un sentido más figurado y familiar, se utiliza la expresión dedada de miel para describir acciones que se realizan con el fin de mantener a alguien en sus esperanzas, sugiriendo una especie de engaño o ilusión.