La delación es un acto mediante el cual una persona informa a las autoridades sobre la comisión de un delito o falta, con el propósito de que se tomen medidas legales al respecto.
La delación puede ser realizada de forma voluntaria o bajo presión, y su objetivo es contribuir a la justicia y al mantenimiento del orden social.
En algunos contextos, la delación puede ser vista como un acto de traición o deslealtad, especialmente cuando se realiza con motivos egoístas o malintencionados. Sin embargo, en otros casos, la delación es considerada como un deber cívico y moral, ya que contribuye a la prevención y persecución de conductas ilícitas.
En muchos sistemas legales, se establecen normativas específicas para regular la delación y proteger a los denunciantes de posibles represalias o injusticias.
Ejemplos de uso: "La delación de un delito es fundamental para que las autoridades puedan tomar medidas legales al respecto"
"En muchos sistemas legales se establecen normativas para proteger a los denunciantes de posibles represalias o injusticias relacionadas con la delación"
Origen etimológico de delación: proviene de la palabra latina delatio