El término delito in fraganti se refiere a un delito flagrante, es decir, a aquellos actos delictivos que son cometidos en el momento en que son observados o captados por las autoridades.
Esta expresión implica que el autor del delito es sorprendido en el acto, lo que facilita su detención y la aplicación de la ley.
La inmediatez de la acción delictiva es clave para entender su naturaleza y las consecuencias legales que conlleva.