El depósito legal es la obligación de entregar al Estado un número específico de ejemplares de obras impresas en el país, independientemente del método utilizado para su producción.
Esta práctica, que busca asegurar la difusión y preservación del patrimonio cultural, es común en casi todas las naciones.
En España, se estableció en 1711 y ha evolucionado a través de diversas normativas, contribuyendo al enriquecimiento de la Biblioteca Nacional y a la visibilidad de la producción bibliográfica nacional.
Obligación de entregar al Estado un número determinado de ejemplares de cuantas obras se impriman en la nación por cualquier procedimiento mecánico o químico, siempre que dichas obras se produzcan con fines de difusión y en ejemplares múltiples. La obligación de efectuar el Depósito Legal de obras impresas es común a casi todos los países. En España data de 1711, y ha venido rigiéndose por sucesivas normas, hasta culminar en el reciente Reglamento establecido por Decreto de 23.12.57. Los fondos recibidos enriquecen la Biblioteca Nacional, y dan a conocer toda la producción bibliográfica del país.