El término desamorrar se utiliza en un contexto familiar para referirse a la acción de hacer que alguien levante la cabeza o, en otras palabras, que abandone su estado de silencio para participar en una conversación.
Esta palabra evoca la idea de romper con la inactividad o el aislamiento, invitando a la persona a interactuar y compartir con quienes la rodean.
Es un llamado a la comunicación y al intercambio social.